abril 22, 2009

Paradero


Quise subir por las escaleras pero no me dejaron, decían que algo ocurría, que no podía pasar... que mejor no pasara. Yo intrigado para variar asomé mi oido entre la multitud para entender porqué el cielo estaba tan gris y a todos nos costaba respirar. Un amigo que había conocido hace treinta y tres segundos me decía que mejor tomara rápido la micro, que eso importaba, que llegaríamos tarde si mi confusión seguía. Pero yo, cual terco frente a un loro, decidí pasar a toda costa, la duda me estaba matando. Me quité la ropa y de un segundo a otro todos se voltearon y centraron su mirada en mi: las cámaras, los chinchineros, los "sapos" e incluso un hombre de verde... pude avanzar unos doce pasos entre la multitud y ahí me encontré con otro tipo desnudo al igual que yo: él había entendido y ya no le costaba respirar.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Buena hueon !!
me gustó hay mejorado harto

Cote gaona dijo...

el desahogo es ultra necesario,me gustó